El sector apuesta por una mayor competitividad en el exterior, aunque es consciente de que hay que ir a una mayor integración
Las cooperativas agroalimentaria están teniendo un comportamiento francamente bueno desde hace años, aunque aún queda mucho camino por recorrer. Una buena prueba de ello es que en un entorno de crisis son capaces de crear empleo y de aumentar su facturación. Así lo ha puesto de manifiesto el director general de Cooperativas Agro-alimentarias, Eduardo Baamonde, en su asamblea anual celebrada ayer. Según los últimos datos disponibles, entre 2010 y 2011el empleo aumentó un 4,1%, incrementándose hasta un 6,7% si tomamos como referencia desde 2006. En cuanto a la facturación ésta ascendió en 2011 a 19.172 millones de euros, un 10% más en relación al año anterior y un 13% más en los últimos cinco años. La facturación directa del cooperativismo agroalimentario supone un 46% del valor de la producción final agraria
y un 22% del valor de las ventas netas de la industria agroalimentaria
española, con una clara vocación exportadora. El 28% del total de
cooperativas españolas, que se sitúa en 3.861 según el último censo,
exportan sus productos fuera de nuestras fronteras. Un 20% del total de su facturación procede de las exportaciones. «Estas cifras permite asegurar que las cooperativas están soportando mejor la crisis», apunta Baamonde.
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